Una Mirada del Psicólogo Pastoral sobre Marcos 9:38-40
Una Mirada del Psicólogo Pastoral sobre Marcos 9:38-40 y Recomendaciones al Acompañado
Marcos 9:38-40 nos narra un episodio en el que Jesús reprende a sus discípulos por impedir que un hombre que no pertenece a su grupo expulse demonios en su nombre. Este relato ofrece valiosas lecciones para la psicología pastoral, abordando temas como la apertura, la acogida y la unidad.
1. Apertura a lo diferente:
Jesús invita a sus discípulos a abrirse a la posibilidad de que otros, incluso aquellos que no son parte de su círculo cercano, puedan realizar acciones buenas y poderosas en su nombre. Esta enseñanza nos recuerda que la gracia de Dios no se limita a un grupo específico, sino que se extiende a todos.
2. Acogida e inclusión:
Jesús reprende a sus discípulos por su actitud excluyente y les recuerda que no deben impedir que otros hagan el bien en su nombre. Esta enseñanza nos invita a acoger con amor e inclusión a todas las personas, sin importar sus creencias o prácticas.
3. Unidad en la diversidad:
El episodio nos recuerda que la unidad no significa uniformidad, sino que es posible coexistir y colaborar con personas que tienen diferentes perspectivas o enfoques. La unidad verdadera se basa en el amor, el respeto y la búsqueda del bien común.
Recomendaciones:
1. Cultiva la apertura mental:
Es importante estar abierto a nuevas ideas, perspectivas y experiencias. Reconoce que no tienes todas las respuestas y que puedes aprender de los demás.
2. Practica la acogida e inclusión:
Acoge a todas las personas con amor y respeto, sin importar sus diferencias. Sé amable, comprensivo y tolerante con los demás.
3. Promueve la unidad en la diversidad:
Busca la colaboración y el diálogo con personas que tienen diferentes perspectivas o enfoques. Enfócate en lo que une a las personas, no en lo que las divide.
4. Evita la exclusión y el juicio:
No excluyas a nadie por sus creencias o prácticas. Abstente de juzgar a los demás y trata de comprender sus puntos de vista.
5. Recuerda que todos somos parte de la misma comunidad:
Reconoce que todos somos hijos de Dios y que estamos llamados a vivir en unidad y armonía.
Este relato de Marcos 9:38-40 nos invita a reflexionar sobre la importancia de la apertura, la acogida y la unidad. El acompañante pastoral tiene un rol fundamental en ayudar a las personas a cultivar estas actitudes y a construir relaciones más sanas y constructivas con los demás. También puede brindar un apoyo efectivo y significativo a quienes buscan crecer en su fe y en su relación con los demás.
Lic. Raúl Manuel Nieto, psicólogo, Reg, Prof 6506 Py,
Ha cursado licenciatura en Teología Pastoral en la UCA (argentina)
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