Sabado 25 de mayo. Marcos 10:13-16. Los Niños y el Reino de Dios: Una reflexión desde el Acompañamiento Emocional
Marcos 10:13-16 nos presenta un episodio en el que Jesús recibe a los pequeños con cariño y afirma que el Reino de Dios pertenece a los que son como ellos.
Este encuentro, cargado de simbolismo, nos invita a reflexionar sobre la importancia de la infancia, la acogida y el valor de la inocencia. A lo largo de esta reflexión, analizaremos este pasaje en profundidad y exploraremos sus implicaciones para nuestra fe y nuestra relación con los más pequeños, sobre todo en lo que respecta a su salud emocional.
A continuación, analizaremos este pasaje desde una perspectiva pastoral.
1. La Iniciativa de los Niños (Marcos 10:13):
El texto destaca que son los pequeños quienes se acercan a Jesús, mostrando su espontaneidad y confianza. Este detalle nos recuerda que ellos tienen una intuición natural para buscar la bondad y el amor.
2. La Reacción de los Discípulos (Marcos 10:14):
La actitud inicial de los discípulos es de reproche hacia ellos, reflejando una visión adulta que subestima las puntas de la vida, y lo frágil. Este contraste resalta el valor que Jesús le da a los más pequeños.
3. La Indignación de Jesús (Marcos 10:14):
Jesús se indigna ante la actitud de los discípulos, demostrando su profunda preocupación por el bienestar y la acogida de los niños. Esta reacción nos invita a examinar nuestras propias actitudes hacia estos. Todos llevamos un pequeño niño dentro.
4. La Llamada a Recibir a los Niños (Marcos 10:15):
Jesús utiliza una imagen poderosa para enfatizar la importancia de recibirlos: "el que no reciba el reino de Dios como un niño no entrará en él". Esta enseñanza nos recuerda que la sencillez, la inocencia y la confianza son cualidades esenciales para acceder al reino de Dios.
5. La Bendición de Jesús (Marcos 10:16):
Jesús los abraza y bendice, confirmando su amor y acogida hacia ellos. Esta imagen nos recuerda el valor intrínseco de cada ser humano y la necesidad de protegerlos y cuidarlos.
El Acompañamiento Emocional de los pequeños:
En ayuda pastoral, el acompañamiento emocional de los pequeños es fundamental. Debemos ser sensibles a sus necesidades emocionales, brindarles un espacio seguro para expresarse y ayudarles a desarrollar mecanismos de afrontamiento saludables.
1. Establecer una Relación Confiable:
Es fundamental construir una relación de confianza mutua con el niño, creando un espacio donde se sienta seguro y escuchado sin temor a ser juzgado.
2. Escucha Activa y Empática:
Debemos escuchar con atención y empatía las emociones y experiencias del niño, validando sus sentimientos y comprendiendo su perspectiva.
3. Promover la Expresión Emocional Sana:
Es importante ayudar al niño a expresar sus emociones de manera sana y asertiva, enseñándole a identificarlas, nombrarlas y comunicarlas de forma adecuada.
4. Fomentar la Resiliencia:
Debemos ayudar al niño a desarrollar mecanismos de afrontamiento saludables para enfrentar las dificultades y desafíos de la vida.
5. Ofrecer Recursos y Apoyo Profesional:
Si la situación lo requiere, debemos estar dispuestos a referir al niño a otros profesionales o recursos que puedan brindar apoyo adicional.
Marcos 10:13-16 nos recuerda la importancia de los que crecen a partir de lo pequeño, y la necesidad de proteger y acompañar el desarrollo emocional. Desde el acompañamiento pastoral, podemos brindar un apoyo valioso, ayudando a cultivar la alegría, la pureza de corazón y la confianza que son esenciales para acceder a la plenitud de la vida. Recordemos que nuestro objetivo principal es promover el bienestar integral de todos, acompañándolos en su camino hacia una vida sana y feliz.
Lic. Raúl Manuel Nieto, psicólogo, Reg, Prof 6506 Py, Ha cursado licenciatura en Teología Pastoral en la UCA (argentina)
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